Se puede alcanzar un estado correcto de relajación a través de los sentidos, prueba a añadir un par de gotas de aceita de lavanda a tus sábanas o incluso utiliza aceites corporales con olor a lavanda después de darte una buena ducha o baño caliente para calmar los músculos. Come miel, nueces o lácteos, alimentos ricos en triptófanos que pueden ayudarte a dormir.